miércoles, 13 de abril de 2011

POLÍTICOS, ESOS SERES TAN HONESTOS


Ayer estaba ojeando el diario ADN cuando encontré una noticia que llamaré curiosa, eufemísticamente hablando. Decía así:

¿LA CORRUCPIÓN DEL PSOE ES MENOS CORRUPTA QUE LA DEL PP?

Lo afirmaba ayer el secretario de organización del PSOE, Marcelino Iglesias. Los uno
s denunciaron que en las listas populares para las elecciones del 22 de mayo había muchos nombres salpicados por corrupción -véase Francisco Camps en la Comunidad Valenciana-, y los otros contraatacaron argumentando que entre los socialistas también había algunos nombres sospechosos. Pero desde el PSOE consideran que sus imputados lo son menos y, en palabras de Iglesias, "no es comparable", porque mientras que los suyos están imputados por temas relativos "a procedimientos administrativos", los del PP lo están por delitos de "apropiación o enriquecimiento personal".

Lo sorprendente no es que el periódico titule la noticia con una interrogación, mostrando su falta de confianza en las afirmaciones de Iglesias, cuando, recordemos, las publicaciones actuales no hacen nada más que recalcar su supuesta objetividad delante de los hechos. *
Lo indignante es la desfachatez con la que los partidos políticos discuten sobre quién tiene más corruptos entre sus filas, admitiendo abiertamente y sin ningún tipo de vergüenza que les gusta utilizar el poder para beneficio propio.
Y no se trata de partidos políticos poco conocidos, sino de los dos partidos mayoritarios españoles.
Sin embargo, en este país ya estamos tan acostumbrados a la corrupción política que no nos sorprende en absoluto y, muy probablemente seguiremos votando a un partido o a otro. Total, ¿qué más podemos hacer? Parece que no existan otras alternativas políticas.

Aquí queda demostrada la locura de todos nuestros conciudadanos. Con todo mi afecto,

Señora X

*Se trata de algo totalmente inviable. Quien dude que le pregunte al periodista Francesc Burguet, quien se lo dejará perfectamente claro, aunque puede que entre gritos y un inmenso sentimiento de indignación, dependiendo del humor con el que lo encuentre (no se haga muy buenas expectativas).

No hay comentarios:

Publicar un comentario